Por sus venas corre sangre rojiblanca, que enriquece su talento innato y fortalece su objetivo desde que limpió su inocencia. Paolo Guerrero, la esperanza de gol en el Mundial, se reinventa contra el reloj, rompe redes sin piedad, afina la puntería perforando la valla de Gallese, Cáceda, Carvallo o el que se ponga al frente.
En el penúltimo ensayo previo amistoso ante Suecia, el “9” estuvo imparable en la definición y la “pichanga”. Con Solano de ejecutor, el “Depredador” no se cansó de anotar de cabeza, su otra virtud, que pagó caro la “Pantera”.
Un show de goles que no tenía cuándo acabar y que dejó boquiabiertos a los periodistas alemanes, quienes cruzaron la frontera Alemania-Austria para charlar con el jugador bandera de Perú. “Con este grupo todo es posible en el Mundial. Nosotros esperamos ganar y para eso tenemos un gran grupo”, respondió Paolo en alemán a los reporteros de la cadena de televisión ORF TV.